Desperté a las 9 am (hora cambiada y todo) con una llamada perdida de la actual encargada de coffe net (no por mucho tiempo creo yo) diciéndome algo en las lineas de... tengo que hacer algo de la escuela (hoy domingo 4 de abril) y me duele mi pierna y no se si valla...
después de repasar rápidamente el hecho de que el día anterior había llegado a las 3 de la tarde (en teoría por haber ido a hacer "algo de la escuela"), pero bueno, le dolía su piernita y había tomado analgésicos, que si le surtían efecto a tiempo me llamaría para decirme a que hora llegaba... ajam...
Pero allí me ves, dando el beneficio de la duda que se merecen los seres humanos. Pues bueno, decidí abrir el local y quedarme hasta la hora de la tarde en que la susodicha había ido el día anterior, lo cual me daría tiempo de ir a correr.
En el transcurso del día en el café hubo un par de ofertas de trabajo, pero la primera venia de una señora cuya facilidad para la familiaridad, un tic nervioso y una cantidad no despreciable de prisa, me disuadieron de aceptar y preferí referirla a los proveedores de lo que necesitaba directamente (si es tan urgente porque no?)
El segundo envolvía hackear una cuenta de correo, con acceso a la maquina de la persona de quien querían el correo, aunque por un par de minutos pensé lo sencillo que debería ser encontrar un keylogger, desactivar el antivirus y entregar en cuanto los datos de su correo sean recibidos por mi... Llegue a la conclusión de que era umbral de lo moralmente cuestionable..
Sea como sea pude cerrar a las 4 pm y partir a correr.
Tenia la idea y me sentía con la energía de correr las 5 vueltas en una hora (aprox 10.5 km), sin embargo a la mitad de la tercera vuelta una sensación muy desagradable (y difícil de describir) me hizo bajar el ritmo y concluir con los seis kilometros reglamentarios.
La sensación era como la de un musculo cansado descansando (alias la relajación y sensación placentera producto de esta) pero en el centro del pecho ligeramente cargado a la izquierda, si, quizás en el área del corazón. lo trascendente y molesto es que estaba en plena carrera y me sentía algo falto de aire.
Atribuí la sensación a mantener una velocidad demasiado elevada por demasiado tiempo, (11m6s para la primera vuelta).
Despues de terminar de correr y evaluar la función de la constancia sobre de la intensidad (cosa que debi de haber interiorizado al momento) procedí a bañarme y comer, mas tarde a dormir.
Mas tarde en linea (pues desperté a las 10 pm) y ligeramente drogado por las endorfinas me topo con otra susodicha en linea, y ayi voy a pecar de optimista dirigiéndole la palabra.
Después de un parco "silencio quieres silencio tendrás", atendiendo a un impulso que me es relativamente familiar (el de no discutir por messenger y hacer lo posible por ver a la persona en cuestion) le informe que iba a sentarme en el porche de su casa y si quería podía salir a conversar. No le di mucha opción, me desconecte y partí.
Recuerdo que la ultima vez que decidí partir a ver a alguien a esas horas... amanecí en la delegación testificando contra el idiota que me había robado el celular con su banda de amigos...
En el trayecto me di cuenta de que estaba haciendo algo que ya había planeado... para dentro de tres o cuatro meses...
Hay cosas que por mas razón que haya de por medio para disuadirlas, son simplemente irrefutables, y eso incluye el pensar algo de alguien por quien se tiene un sentimiento fuerte, sea cuales sean sus actos o inacciones, el sentimiento entintara la opinión.
Y ahí iba yo a intentar contrarrestar un malentendido, reconocer la muerte de una relación y dar pie a otra mas real y sana.
Los resultados, bueno pues, variados. En primer lugar menos violencia de la que esperaba, en desafortunado segundo: indiferencia. Sea pues, no es que me sorprenda la capacidad para el egoísmo de esta mujer, en buena medida su atractivo y su aporte a mi vida están fundamentados en ello.
Pero la indiferencia fue relativamente letal, no tenia herramientas para iniciar la conversación que quería, estuve ahí escuchándola decir cosas que ya había escrito yo en mis monólogos con su avatar, si bien de cierta manera sirven para confirmar sin lugar a dudas lo que creía (mi botch de empatia, el no darme cuenta de que sus silencios no eran un maybe sino su forma retorcida de no contradecir ni herir a las amistades, el mismo reclamo por los minutos acosadores que le dábamos al otro), y lo que no venia de esa venia era un breve listado de los eventos difíciles de manejar que le habían acontecido desde que dejamos de hablar.
Noviembre me parece.
La muerte es algo interesante, yo en lo personal la encuentro trascendente y casi sagrada, aprecio la reverencia por los muertos y creo que no es algo que nadie debiera de tomar a la ligera. Sin embargo me parece que estoy muy distanciado de las personas que mueren alrededor mio. Se llorarlos cuando es el momento y recordarlos ocasionalmente. También se dejarlos ir y no hacer de ellos un evento en mi vida mas grande de lo que fueron en vida.
Y respecto a los minutos no puedo dejar de sentir envidia por la cantidad de cosas que ella tuvo disponible para rellenar, entre la escuela, el trabajo, las amistades y su novio nunca me cupo duda alguna de que seria breve el tiempo para reemplazarme.
Yo por estos rumbos intento llenarlos con horas de estudio, ejercicio, trabajo y juego, todas actividades solitarias, y ahora que se entrare a la universidad agradezco el tener almas humanas abundantes y variadas con quienes conversar en lugar de hacerlo con ustedes míticos lectores (no es que los desprecie, pero aprecio el ver y tratar a las personas cara a cara).
Por lo demás me enfrente al enojo controlado y a una conclusión que se dio el lujo de tomar a mi respecto en algún momento de estos cinco meses (la cual navega los rumbos mas nefastos atribuyéndome poderes de maquiavelismo y crueldad que en buena medida me halagan).
Al final, ligeramente decepcionado partí de vuelta a casa, la chica en cuestión no quería hablar mas, y aunque siempre eh sido partidario de no rendirse en ninguna causa hasta que uno este dispuesto a hacerlo definitivamente, una conclusión espontanea me llevo a no perseguir mas la cuestión.
La agenda original era:
Aclarar que no tenia razon para estar enojada conmigo;
Esencialmente reconocer que no podia reprocharle lo que no hizo, pues conociendola como la conocia debi de haberlo intuido a tiempo y en eso somos equivalentemente culpables.
ninguno de los dos esta perdiendo mas que el otro y no había otra forma de resolver la situacion que no fuese la distancia.
Si su perspectiva y aliento es probable que hubiese cedido al esquema de trabajar para dios sabe que y estudiar una carrera abierta que me era solo marginalmente atractiva.
Comunicarle lo que estaba haciendo para "superarla" y mis intenciones a mediano y largo plazo.
Hacerle ver que si bien la herida es profunda sanare y no tiene sentido buscar responsables. Hacerle ver que aunque no veo punto de reencuentro entre ella y yo alimento mi ambición para crecer y tener mas que ofrecer para una futura pareja.
Terminar la noche con la tranquilidad de saber que no dejo atras a una enemiga, y que estamos en la misma sintonia para evitarnos lo justo.
Evitar los rencores y poder vivir sin necesidad de experimentar incomodidad cuando nos topemos en el futuro.
Pero bueno, mi hippy interior y mi tendencia al optimismo recibieron un puntapié al trasero y a la cara respectivamente, y después llego la conclusión liberadora:
La realidad es que la amistad que existió se debe en buena medida a esos silencios que el beneficio de la duda mantenía indefinidos. De haberme rechazado a tiempo, digamos, en cualquier momento previo al ultimo año, le hubiera conservado como a otras amistades femeninas de quienes me informo una vez cada dos o tres meses, y a quienes siempre disfruto ver (considerando que esto se da cada seis meses o un año).
No deseaba volver a la relación altamente demandante que tenia con ella, cuando estaba entero y fuerte, los costos de mantenimiento me eran fáciles de cubrir, sus faltas de empatia eran cubiertas por las perspectivas que aportaba. Pero estando solo una vez mas me di cuenta de que necesitaba mas atención de la que ella es capaz de dar. Mi paciencia era alentada por mis deluciones, y sin estas no estaría nisiquiera agusto en su compañía.
No quiero una relacion de pareja con ella: Quiero vivir y crecer agusto sin dramas gratuitos y complicaciones artificiales innecesarias, la unica ventana de oportunidad en que eso se pudo haber dado, la cerre en noviembre del año pasado.
Lo que aspiraba conseguir hoy es una relación distanciada en la que le daría lo que me naciera y la mandaría lejos mucho mas rápido y a menudo que antes.
Esa conlcusion que me tomo mas escribir que dilucidar y sentir me permitió ver que era un absurdo estar en su casa a las doce de la noche intentando hacerle ver nada. Y que lo mejor era partir.
Sea pues, de camino de vuelta a casa, el beneficio de la duda apesar de haber sido apuñalado, envenenado, tiroteado, golpeado y castrado se tambaleaba todavía junto a un río...
Me pregunto que es mas humano... o menos cruel. darle un empujón, o tratar de salvarlo... La realidad es que es probable que muera por sus heridas antes de que logre decidir que hacer.
No habiendo transcurrido un tercio del año, dos curvas amplias y trascendentes se han cerrado. Y no puedo esperar para rellenar esas órbitas vacías.
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