Adios

Como empezar?

Quizás por los momentos mas bellos, aquellos que nos dieron mas con que vivir, con que soñar. Los momentos que nos hicieron construir alrededor del otro un culto, nosotros tan cinicos en su momento, tan desconfiados de la vida y de sus promesas. Nosostros que no veiamos mas alla de el presente, no por falta de perspectiva respecto al mundo, sino por exceso de conocimiento. Por familiaridad con la amargura.

Creímos uno en el otro a base de una elaborada construccion de silencios, promoviendo agendas de cautela y cuidado para con el otro, hasta que nos envolvimos mutuamente en terciopelo y seda. Poseyendo no solo los cuerpos, sino tambien los planes y la imaginaicion del otro, un juego tan pasional de descubrimiento y conquista que nadie creería que se esta llevando acabo de presenciarlo desde el exterior.

Contra toda posible advertencia de la experiencia, la cordura y la salud, nos dedicamos a mitificarnos y entregarnos mutuamente, extasiados al ver al otro aceptarnos y querernos aun mas. Minuto a minuto, charla con charla, con cada beso y caricia, nos hicimos afines a la esencia del otro mientras progresábamos en un sendero de relativa armonía.

Esos fueron los dos años mas bellos de mi vida, solo mintiendo podría afirmar lo contrario, conocí el calor de la confianza, el estimulo y el recato que provoca la admiración, sentí emociones que no creía posibles, imagine un mundo para ambos, Sobre todas las cosas, descubrí que no era este un ejercicio mal hecho de existencia, al fin experimente una vida plena.

Paso, el tiempo, nos hicimos falta, pero la imperante demanda de cuerpos para el engranaje del mundo nos mantenía separados, y en nuestra desesperación decidimos atenernos a las circunstancias para estar juntos y así poder disfrutarnos mutuamente sin tregua. Tengo fresco en la mente los tiempos en que la relevancia del sueño y la comida era técnicamente nula, solamente actuábamos en la medida necesaria para poder encontrarnos con el otro y así robarle al mundo unos minutos mas de vida.

Me imagino que fue por estos tiempos que empezamos a fallar, posponiendo perpetuamente lo deseado, siempre en la persecución de algo ulterior decidimos posponer placeres que nos debíamos, creyendo que estaríamos por siempre alli para satisfacerlos se nos hizo facil esperar.

Y esperamos, esperamos mas de lo que debíamos, mas de lo que podíamos, juntos esperamos sin darnos cuenta de que esperábamos cosas distintas. Entiendo tus sueños, las mieles del mundo son variadas e insidiosas. Entiendo tus gustos, veo como cada uno de ellos llego a tu vida y le dio sentido en su momento. Puedo ver claramente que estas determinada al punto del fanatismo en alcanzar algo que parece ser un mito en el mundo tal cual lo conocemos.

Y no puedo reprocharte nada de eso. Es lo que eres después de todo, la superficie que tomo tiempo deshilvanar solo usaba de vestimenta lo que yo creía era un leitmotiv, formas semejantes fondos diferentes es quizás la mejor forma de definirnos.

Tomo tiempo averiguar todo esto, tomo tiempo, acción e inacción, cariño y resentimiento, muchas noches de incertidumbre y desencanto.

Cuando la forma de nuestra interacción tuvo que aclimatarse a constantes mas mundanas, las diferencias de fondo dejaron de ser irrelevantes para mostrarse en todo su horrendo esplendor.

Descubrimos que en el otro había mas que necesitábamos cambiar, que lo que podíamos disfrutar y nos descubrimos tan incapaces de alcanzar el corazón del otro, con argumentos, acciones y demás estratagemas que optamos por la silenciosa rendición, otra vez esperando, esta vez un cambio.

No hay cambio que pueda llegar a solucionar lo que no necesita ser solucionado.

Es solo nuestra terquedad la que insiste en que sigamos juntos. La incapacidad de aceptar que nuestra relación ah dado los frutos que debía y que es tiempo de dejarle ir. So pena de sufrir el ver su decadencia con lujo de detalle.

Te ame, de ello no cabe duda alguna, y creo que todavía amo a la mujer que quedo albergada en mi memoria, la que vivía construyendo mundos alternos y buscando horrores en las sombras mas inocentes de la noche.

Pero la persona que eres ahora debe proseguir su camino, y yo no soy quien para caminar contigo ya.

Demian.